¿Las parejas deberían influir sobre cómo nos vestimos? 

ALGUNOS COMENTARIOS

Hemos escuchado recurrentemente algunos comentarios que nos hacen estallar la cabeza. Frases como “mi esposo nunca me dejaría usar eso”, “Si, el body está muy lindo, pero a mi pareja no le gusto y me lo quite”, “Me coloque el corsé para salir de noche, pero mi novio me dijo que no debía ponérmelo porque todos los hombres se me quedarían viendo” o “Me encanta usar hilo dental en la playa, pero ya no me los pongo porque mi pareja cree que estoy provocando a otras personas”. 

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La forma en la que nos vestimos, es la expresión más directa de nuestra personalidad. Factores como nuestra manera de ver al mundo, comodidad ante las condiciones del clima, el código de vestimenta del trabajo, la sociedad y la moda influyen a la hora de escoger las prendas que vamos a utilizar en el día a día. Pero este tipo de decisiones que corresponden a nuestro cuerpo deberían estar reservadas totalmente a nosotras y aunque podemos dejar que otras personas nos den su opinión, debemos tener siempre la última palabra.

¿ELLOS DEBERÍAN OPINAR?

 “EL QUE NO OYE CONSEJOS, NO LLEGA A VIEJO”. De forma regular, muchas personas están opinando constantemente sobre la forma que nos vestimos. Desde que comenzamos a tener conciencia, las madres primero que todo, luego hermanas, amigas, compañeras de trabajo entre otras, nos dicen que nos puede quedar bien o que no tanto, o cual es el mejor traje que se adapta a ese compromiso. Estas opiniones no se realizan con una mala intención, sino que de forma sincera, nos quieren ayudar a vernos y sentirnos mejor.

Pero, ¿qué pasa cuando la persona que elegimos como pareja, comienza a querer inmiscuirse en la forma que vestimos?¿Deberíamos dejar que tome las decisiones en la ropa que utilizamos?

¿CONTROL O AYUDA?

Este punto puede verse de dos formas: 

La primera es si sentimos que la pareja, emite este tipo de comentarios, porque quiere que hagamos lo que él quiera o porque se siente incómodo por la ropa que utilizamos. Esto debe de inmediato encender las alarmas y objetar si esa persona nos conviene.  

Tener pareja, no significa dejar de hacer lo que a uno le gusta o cumplir órdenes de otra persona. No se debería pedir permiso, si queremos vernos sexys utilizando un hermoso body de encaje o corsé como outfit, o si queremos utilizar bikini en la playa. Estas decisiones son tuyas y tu compañero sólo debe acompañarte haciéndote sentir mejor. 

La segunda forma de ver las opiniones de la pareja sobre tu forma de vestir, es que ciertamente quieren ayudar. Tú lo conoces bien y sabrás que sus palabras no están guiadas por los celos. Hay ciertos hombres que tienen un instinto innato por la moda y te pueden recomendar las prendas perfectas para salir. Incluso sugerir cosas mejores de las que tienes en mente y adaptadas a las circunstancias.  

Si tu pareja no es de este tipo de personas, puedes ir entrenando y poco a poco sus recomendaciones serán más acertadas. Para eso son las parejas, para ayudar y complementarnos, no para prohibirnos.

PODEMOS VESTIRNOS PARA COMPLACER A LA PAREJA

Cuando estamos enamoradas unas de las cosas que nos motivan a vestir bien es agradar la vista de nuestro compañero. Así que no está mal si tienes que elegir entre un short o una falda, pero sabes que a él le fascinan las faldas y termines eligiendola.  No está mal complacer a nuestra pareja luciendo las prendas que a él le gusta vernos.  

Lo que sí está mal es que tu odies las faldas, no te sientas a gusto con ellas y aun así la elijas solo para complacerlo. Mucho peor si de cierto modo “te ordene” a usar o quitarte algo.

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DEFENDAMOS NUESTRA AUTONOMÍA Y PODER DE DECISIÓN 

Aunque hace algunos años, las mujeres no teníamos algunos derechos, gracias a nuestras luchas, esta realidad ha cambiado 180 grados. Debemos defender lo que hemos logrado de manera pública y sobre todo en el ámbito privado. Usemos ropa que nos haga ver sexy y sentirnos cómodas si eso es lo que nos gusta. Y si a esa persona no le gusta, ya deberías estar pensando en cambiar de AMBIENTE.